Santo António, conocido como el Santo Casamentero, ayuda a todos aquellos que buscan el amor verdadero y el compañerismo para darle más vida a sus días.
Mi querido San Antonio,
tú que estabas tan cerca de Dios
y llenabas tu vida
de su presencia,
mira cuánto me pesa esta soledad.
Me siento solo, sin corazones que se me abran,
sin alguien
con quien compartir mis alegrías
y mis penas.
Os pido, ante todo,
que hagáis que Dios sea todo para mí;
entonces ayúdame a encontrar
ese corazón comprensivo en el que
pueda confiar
y con quien pueda compartir mi amor,
mis alegrías y mis preocupaciones.
Acompáñame para que no esté solo,
para que Dios me quite esta soledad.
y concédeme este amor que tanto anhelo.
Amén.
Deja una respuesta